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Pink Floyd

Pink Floyd - The Dark Side Of The Moon (1973)

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Uno de los estandartes del rock psicodélico son sin duda Pink Floyd, grandes experimentadores de sonidos y textos de corte existencial y filosófico. El rock psicodélico podría decirse que fue un puente entre el blues y el rock progresivo y además influenciado profundamente por el consumo de alucinógenos, pero generalmente los autores de este género comenzaron sus andanzas musicales cercanos al blues, de hecho el nombre de la banda se debe a los nombres de dos músicos de blues Pink Anderson y Floyd Council. La semilla de la banda estuvo presente previamente bajo diferentes nombres, Roger Waters, Bob Klose, Nick Mason y Rick Wright finalmente decidieron montar una nueva banda a la que se uniría el vocalista Syd Barrett y tras un pequeño periodo llamándose Tea Set, finalmente se denominarían Pink Floyd. Desde el comienzo se apreciaron las influencias de la literatura en sus composiciones y a menudo harían uso del surrealismo, pero pronto comenzarían a experimentar con efectos sonoros, ruido y osciladores alcanzando el mayor grado de psicodelia en Ummagumma en 1969. Pero el éxito llegaría en los años setenta de la mano de sus discos más aclamados por crítica y público y sin perder un ápice de su originalidad y constantemente explorando nuevas posibilidades sonoras.
De estas grandes bandas de algún modo se tiene siempre la sensación de conocerlas de toda la vida. El primer recuerdo que tengo es de imagenes de la película The Wall (Alan Parker, 1982), basada en el álbum de Pink Floyd, aunque esas imagenes que tengo en la cabeza son algo difuminadas, pero lo que tengo claro es que el primer disco que escuché fue The Dark Side Of The Moon que me prestó un amigo, creo que era de su padre y lo que me llamó mucho la atención fue la portada, un simple prisma refractando luz, pero algo distinto se entreveía; después durante la escucha lo pude comprobar.

Pink Floyd - The Dark Side Of The Moon (1973)

The Dark Side Of The Moon es seguramente el disco más importante de Pink Floyd y no solo por el éxito de acogida de crítica y público (permaneció durante 14 años en las listas de los más vendidos), sino por la atemporalidad que ha logrado tener este álbum que no ha envejecido ni un ápice, quizá porque los temas tratados  (la naturaleza del ser humano, la avaricia, la vejez, la muerte) son universales y a todos nos incumben, es por ello que las nuevas generaciones que escuchen el álbum queden hipnotizados por las melodías y efectos sonoros, así como las letras cantadas en tono lánguido y acompasado que ahondan en la arista filosófica que tratan.
En el comienzo del álbum, dos canciones van de la mano, Speak to Me y Breath hablan sobre la banalidad de las propiedades mundanas y la importancia de cada uno vivir la vida a su manera, de aquí se pasa a la estresante On The Run, en la que mediante sintetizadores evocan la velocidad, el estrés y la ansiedad que provocan la vida moderna. Tras un sonido de relojes, comienza Time como una advertencia de lo que nos decían en Breath, el paso del tiempo aferrándose a las cosas mundanas puede llegar a dejarnos sin control sobre nuestra propia vida. Le sigue The Great Gig in The Sky, una reflexión metafórica sobre la constante proximidad de la muerte acompañada de piano y la intensa voz de Clare Torry que a mi en particular me llega a poner los pelos de punta. Money es el tema más conocido del álbum y quizá el más extraible de la obra conceptual, sonidos de cajas registradoras y una letra irónica como crítica a la avaricia y al consumismo. Us and Them retoma el aire pausado y sosegado en tono de balada para hablar sobre las relaciones humanas y la soledad. Enlaza sin pausa Any Colour You Like, canción instrumental que trata de evocar el concepto de falsa libertad que en ocasiones tiene el hombre y también de forma enlazada comienzan las primeras notas de Brain Damage, canción sobre la locura en la que explican como el éxito individual puede prevalecer sobre el bien colectivo en clara alusión a lo sucedido con el antiguo lider de la banda Syd Barret, enloquedcido por el éxito y en mayor medida por el consumo de drogas. El título del álbum hace referencia a esta canción, "I'll see you on the dark side of the moon" nos veremos en el lado oscuro de la luna. Eclipse llega también enlazada en la que se insta a la humanidad a reconocer sus semejanzas entre individuos y proclama la unidad. Significativo es que comienzo y fin del álbum se unan mediante unos latidos de corazón, el contenido de todo es la vida misma, lo bueno y lo malo. Disco imprescindible, sin duda.

No quiero dejar de pasar por alto una de las coincidencias más curiosas en el mundo audiovisual y digo coincidencia porque los miembros de Pink Floyd siempre han dicho que es una mera casualidad. Se trata de The Dark Side Of The Rainbow, que es como se conoce a la sincronización del álbum con la película El Mago de Oz (Victor Fleming, 1939). Se desconoce quien fue la primera persona que trató de sincronizar, pero lo cierto es (y yo lo he podido comprobar) existen muchos puntos en los que imagen y sonido del álbum coinciden en significado o cambios de secuencia. Sea como fuera una curiosidad que vale la pena observar.

Tracklist:

   1. Speak to Me - 1:16
   2. Breathe - 2:44
   3. On the Run - 3:32
   4. Time - Breathe (Reprise) - 7:06
   5. The Great Gig in the Sky - 4:44
   6. Money - 6:32
   7. Us and Them - 7:40
   8. Any Colour You Like - 3:25
   9. Brain Damage - 3:50
  10. Eclipse - 2:04

Enlaces generales:

Pink Floyd - Oficial, Pink Floyd - WikipediaPink Floyd - MySpace

Enlaces del album:

Last.fmGrooveshark

Otros:

Allmusic Review, The Dark Side Of The Moon - Wikipedia, Hipersonica - The Dark Side Of The Moon (1ª parte), Hipersonica - The Dark Side Of The Moon (2ª parte)

Nota Allmusic.com: 5